Este domingo 63
jóvenes recibieron el sacramento de la confirmación, guiados por
el hermano Abel, celebraron en una homilía presidida por el
Padre Martín.
En primer lugar se dio la bienvenida a los padres,
apoderados y familia, quienes acompañaron a sus hijos en la
celebración de la Primera Comunión compartiendo el gozo de
recibir por primera vez este sacramento.
El mensaje emitido por nuestro sacerdote por medio de
la palabra de Jesucristo nos dice; Dejad que los niños vengan a
mi. La palabra nos invita a descubrir el Pan de la vida, que nos
bendice y anima a vivir nuestra vocación y misión, como verdaderos
apóstoles y testigos de su amor y compromiso. En esta instancia se
recordó a la gran familia marista, hermanos y laicos, para que la
oración sea puente de unión.
Luego de la liturgia de la palabra y de la
proclamación del Evangelio, se realizo la renovación de las promesas
bautismales. Seguidamente se pidió en la oración universal, por el
papa Benedicto XVI, Obispos, Sacerdotes, por los mas necesitados,
por nuestros enfermos, por las vocaciones consagradas y
principalmente se pidió por los niños y niñas que el domingo
recibieron el sacramento de la eucaristía para que con cada uno de
ellos, el amor y la unidad sean frutos de su encuentro con Jesús.
En la ofrenda los alumnos ofrecieron la Biblia, y
libros de catequesis, las catequistas llevaron hacia el altar una
canasta familiar como símbolo de compromiso y amor en este día
especial. Posteriormente una familia llevó hacia el altar el pan y
el vino fruto del Amor de Dios.
Por ultimo nuestro Rector, les deseo la felicidad
absoluta esperando un encuentro muy cercano de nuestros alumnos con
Dios. De esta manera seremos humanos íntegros y llenos de gozo ante
la mira de Jesucristo.
Que Marcelino Champagnat y la Buena Madre nos guíen por el buen
Camino.